Y como cada 4 años la ilusión embarga al país y se une con un fin común, un sueño efímero donde tenemos la oportunidad de ser grandes en algo muy popular a nivel mundial, la copa del mundo, obviamente futbol.
Es hasta tierno el ver como el pueblo de México se desborda y se ilusiona con este evento, ves a familias que sacrifican todo por ir al Mundial de Futbol, en donde sea.
Es impresionante la necesidad de héroes que tiene México y creo que esto es lo que genera el fenómeno, somos los que más gastamos y mejor cobertura tenemos, es un evento extremadamente rentable para las televisoras y por eso le apuestan tanto. Las olimpiadas de invierno pasaron desapercibidas en nuestro país, pero que tal el futbol.
Es preocupante como estamos enfrascados entre tener un pensamiento positivo que genera una gran ilusión y la realidad de nuestra situación. Todos participamos, todos opinamos, todos soñamos y es bueno y saludable.
Lo más importante de esto es darle su correcta dimensión y disfrutarlo, desgraciadamente el ánimo del país se rige por estas situaciones. Lo más sagrado en México es la Virgen de Guadalupe y la Selección Nacional.
Independientemente del resultado, ganará la FIFA, la Federación Mexicana de Futbol, las televisoras, los medio de comunicación y los patrocinadores, espero que genere empleos. Pero nosotros seguimos igual y el miedo latente es que los políticos siguen viendo al pueblo ingenuo que con pan y circo acepta todos los abusos de gente que solo busca el bien personal.
Me gustaría ver a un México trabajando en conjunto y motivados como vemos un partido de México en copa del mundo, pero para exigirle resultados al gobierno, para generar empleos, para ser potencia en investigación y desarrollo, para salir de esta crisis, para exigir justicia e igualdad.
Pase lo que pase las cosas seguirán igual, si a México le va bien, es muy posible que el ánimo general ayude al crecimiento, pero no podemos condicionar nuestro desarrollo al desempeño de 23 jugadores de buena calidad en unos partidos de futbol. Nuestro desarrollo debe de estar fundamentado en trabajo encaminado al bien del país y depende de cada uno de nosotros.
Como dije después del partido contra Francia, “fuimos muy felices por unos momentos, con madre!, vamos a seguir luchando para sobrevivir”
Espero que México le parta en su madre a Argentina, que son bastante mamones, y también espero que México no pierda el piso, independientemente del resultado.
Sería bueno que las diferencias entre países de definieran en un partido de futbol… bueno, no porque seguiríamos jodidos…
Hasta la próxima
Joan Karlos
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